Paciente de 25 años sin antecedentes de interés que tras mal gesto jugando al tenis presentó hinchazón, dolor e inestabilidad en la rodilla.
A la exploración destacaba un McMurray negativo, un Lachmann positivo, un VR/VL estable y un normo eje 140/0. No se observaban signos que sugirieran derrame articular en cuantía significativa. A las cuatro semanas se le realizó una RM.